sábado, 5 de mayo de 2012

FERIA INTERNACIONAL DEL LIBRO .SILVIA FREIRE PRESENTA SU NUEVO LIBRO POR RITA AMODEI

HUBIERAN SIDO 36 AÑOS ** POR RITA AMODEI

HUBIERAN SIDO 36 AÑOS DE MATRIMONIO SI HACE MENOS DE DOS AÑOS NESTOR NO HUBIERA PARTIRDO DE LA VIDA DE CRISTINA Y DE SUS HIJOS Y SUS AMIGOS COMO UN RAYO VULNERADO . CUANDO LOS SENTIMIENTOS , LOS AFECTOS SIGUEN VIVOS PORQUE FUERON VERACES Y ENTRAÑABLES AUNQUE EN APARIENCIA LA LUZ FUERA VULNERADA POR LAS SOMBRAS , " EL RAYO QUE CESA " . QUIERO DEDICAR ESTA POESIA A CRISTINA KIRCHNER , PRESIDENTE ARGENTINA Y ESCENCIALMENTE MUJER , ESPOSA Y MADRE , CARGOS Y FUNCIONES NO PERECEDERAS . ASI ESTE BLOG HOMENAJEA A ESTE MATRIMONIO QUE SEGUIRA UNIDO PARA SIEMPRE PORQUE SON " DOS LAZOS DE AMOR DE UN MISMO CUERPO " . CON NESTOR Y CON CRISITNA EN ESTE ANINERSARIO . Elegía (En Orihuela, su pueblo y el mío se ha quedado novia por casar la panadera de pan más trabajado y fino, que le han muerto la pareja del ya imposible esposo). Tengo ya el alma ronca y tengo ronco el gemido de música traidora… arrímate a llorar conmigo a un tronco: Retírate conmigo al campo y llora a la sangrienta sombra de un granado desgarrado de amor como tú ahora. Caen desde un cielo gris desconsolado, caen ángeles cernidos para el trigo sobre el invierno gris desocupado. Arrímate, retírate conmigo: Vamos a celebrar nuestros dolores junto al árbol del campo que te digo. Panadera de espigas y de flores, panadera lilial de piel de era, panadera de panes y de amores. No tienes ya en el mundo quién te quiera, y ya tus desventuras y las mías no tienen compañera, compañera. Tórtola compañera de sus días, que le dabas tus dedos cereales y en su voz tu silencio entretenías. Buscando abejas va por los panales el silencio que ha muerto de repente en su lengua de abejas torrenciales. No espero ver tu párpado caliente ni tu cara dulcísima y morena bajo los dos solsticios de tu frente. El moribundo rostro de tu pena se hiela y desendulza grado a grado sin su labor de sol y de colmena. Como una buena fiebre iba a tu lado, como un rayo dispuesto a ser herida, como un lirio de olor precipitado. Y sólo queda ya de tanta vida un cadáver de cera desmayada y un silencio de abeja detenida. ¿Dónde tienes en esto la mirada si no es descarriada por el suelo, si no es por la mejilla trastornada? Novia sin novio, novia sin consuelo, te advierto entre barrancos y huracanes tan extensa y tan sola como el cielo. Corazón de relámpagos y afanes, paginaba los libros de tus rosas,' pacentaba el hato de tus panes. Ibas a ser la flor de las esposas, y a pasos de relámpago tu esposo se te va de las manos harinosas. Échale, harina, un toro clamoroso negro hasta cierto punto a tu menudo vellón de lana blanco y silencioso. A echar copos de harina yo te ayudo y a sufrir por lo bajo, compañera, viudad de cuerpo y de alma yo viudo. La inaplacable muerte nos espera como un agua incesante y malparida a la vuelta de cada vidriera. ¡Cuántos amargos tragos es la vida! Bebió él la muerte y tú la saboreas y yo no saboreo otra bebida. Retírate conmigo hasta que veas con nuestro llanto dar las piedras grama, abandonando el pan que pastoreas. Levántate: te esperan tus zapatos junto a los suyos muertos en tu cama, y la lluviosa pena en sus retratos desde cuyos presidios te reclama.